Instagram es una de las redes sociales con más usuarios del mundo y muchas de sus funciones fueron inspiradas en Snapchat, otra comunidad social, como el uso de filtros animados o escribir en los Stories (Vídeos en directo).

Lo que distinguía una app de la otra era que Snapchat te notificaba cuando algún contacto hacía una captura de pantalla de alguna de las imágenes o vídeos que se publicaban. Pues se acabó, en su próxima actualización, Instagram pretende poner límite a las capturas de pantalla de publicaciones que estén protegidas o que de entrada sean privadas, como las Instagram Stories que se envían a una única persona.

Primero, el usuario que tenga intención de guardarse el contenido sin consentimiento recibirá un aviso por parte de la plataforma. Esta notificación no se hace saber al usuario de la imagen o vídeo, al menos no la primera vez.

Si se continúa con las capturas, entonces sí que Instagram marcará con un nuevo icono al usuario que ha tomado la foto. El propietario de las Stories verá un símbolo de un círculo con aspa, señal de que esa persona ha hecho una captura.