Además, Sansó ha explicado que los 1.000 euros que cuesta cada plaza turística se pagan en cinco años, y se reserva durante este tiempo. De esta manera, si un propietario decide, antes de que acaben los cinco años, dejar de alquilar la plaza, puede hacerlo y no pagar la cuantía íntegra. Esto es lo que ocurre en las plazas habilitadas para el alquiler turístico en viviendas plurifamiliares, ya que las plazas de unifamiliares se venden "y por eso son tan caras".
De momento, existe una única bolsa para plazas turísticas que aglutina el alquiler turístico y el hotelero, por lo que tienen, en palabras de Sansó, el mismo precio. Sin embargo, "la zonificación turística podría cambiar de aquí a cinco años" y, además, el precio es "el proyecto inicial" y "se tendrá que aprobar, pero, si hay modificaciones, seguramente sea a la baja". Para ello, de todas formas, se tendrán que presentar alegaciones que tendrán que ser estudiadas por el Govern. La normativa de adquisición de plazas turísticas podría, de esta manera, modificarse.
En cuanto a la zonificación turística de Palma, el director general de Turisme ha asegurado que tiene que aprobarse sí o sí antes de que finalice el mes de julio. "Si no se aprueba, el día 1 de agosto estarán prohibidos los alquileres turísticos en pisos", explicó.
En este mismo espacio, puede ver la intervención íntegra del director general de Turisme de les Illes Balears, Antoni Sansó, en el programa de CANAL4 Ràdio '4Directe'.
