El máximo representante de la Federación Balear de Pescadors contestó a las preguntas de Biel Ramis y aseguró que durante las primeras semanas del estado de alarma hubo problemas de abastecimiento por la falta de coordinación.
"El problema fue porque hubo una gran descoordinación. Nosotros somos el 16% del pescado que se consume en las Islas Baleares. Ha habido días que la flota no ha podido salir por el mal tiempo y otras por el calendario ya estipulado. No se entendía que no se saliera a pescar cuando había una demanda por parte de la población".
Además insistía que había un lucha dentro de la "Lonja" de Palma. "Unos querían que hubiera más oferta de pescado y otros por otros intereses querían que aumentara el precio del pescado".
Por otra parte, explicaba los tipos de flota y cómo se han visto afectadas durante estos dos meses: "Hay tres tipos de flota y la flota más pequeña es la que se ha visto más afectada y es la que más embarcaciones suma".
Finalmente aseguraba sentirse muy satisfecho por los clientes que han ayudado a que la cadena comercial siguiera en funcionamiento: "Estamos muy contentos por la respuesta de la sociedad. Hay una cadena comercial del pescado, y si en algún punto se rompe, se resiente la cadena entera. Aun así los que más sufren son los pescadores más pequeños".
