En una rueda de prensa junto al director general del Servei de Salut, Juli Fuster, tras la reunión urgente del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud que ha acordado la suspensión de la vacunación con la vacuna de este laboratorio, la consellera ha explicado que la paralización de la vacunación masiva de menores de 55 años es temporal y que no se sabe "si será cuestión de días o de semanas".
Fuster, por su parte, ha explicado que a partir de ahora la actividad de vacunación masiva en las instalaciones deportivas en las que había comenzado se paraliza y que continuará en Son Dureta y los centros de salud, con la inmunización de los mayores de 80 años, y las vacunas del resto de laboratorios.
Según han explicado, la comunicación de la paralización se ha producido en el transcurso de la reunión, convocada de urgencia, y aunque suponía la paralización inmediata, en los centros de vacunación masiva, como el polideportivo Germans Escalas, a última hora de la tarde la afluencia de vehículos seguía siendo importante.
Desde Salud han atribuido este hecho a la dificultad de trasladar la decisión a todas las personas implicadas. En este sentido, Fuster ha explicado que a pesar de la cancelación de la vacunación, en estas instalaciones seguirá habiendo personal para efectuar labores informativas en este sentido.
Gómez, por su parte, ha explicado que la decisión de la suspensión se ha tomado "por prudencia" y tras la aparición -aunque en porcentajes "muy bajos"- de efectos secundarios graves que no estaban descritos en la ficha técnica.
Ahora, han apuntado, se están estudiando los casos para determinar si existe o no relación con la administración de la vacuna. La consellera ha apuntado que en Balears se habían administrado hasta el momento más de 40.000 dosis de AstraZeneca sin que se haya constatado ninguna reacción adversa grave y que se habían recibido unas 1.500 del lote afectado.
Gómez ha confiado en que la suspensión sea "temporal y corta" y que pronto la Agencia Europea del Medicamento pueda establecer que no ha habido relación entre los casos de trombo detectados y la administración de la vacuna.
La consellera y Fuster han coincidido en destacar que en relación al volumen de dosis administradas el número de casos detectados ha sido "muy reducido" y han recordado que todos los medicamentos pueden tener efectos secundarios.
Ante la posibilidad de que esta paralización, aunque sea temporal, pueda hacer retornar las reticencias iniciales de parte de la ciudadanía a vacunarse, Gómez y Fuster han hecho un llamamiento a la tranquilidad porque los casos se van a estudiar de manera "minuciosa" y han expresado su confianza en que a partir de ahí, al contrario, pueda generar mayor seguridad en la población.
