Han sido más de dos años muy duros para los sanitarios y el resto de trabajadores de la Cruz Roja, quienes han tenido que convivir con las obras en sus instalaciones y hacer frente a la pandemia sin dejar de prestar su servicio en ningún momento.
Un esfuerzo del que se ha beneficiado buena parte de la sociedad mallorquina y que también ha sido reconocido durante el día de hoy.
Toni Barceló, presidente de la Cruz Roja en Baleares, ha señalado que "el hospital atiende ahora a unas 47.000 personas al año, pero también desde cada una de las áreas que desarrollan programas en el ámbito de la salud y su prevención, la Cruz Roja atiende anualmente a decenas de miles de personas en el Archipiélago, siempre trabajando en red y bajo las directrices y en colaboración de las autoridades sanitarias".
La reforma de este centro sanitario permitirá también un aumento en su capacidad de atención a los pacientes, un bien esencial para la sanidad balear en estos tiempos posteriores a la pandemia, donde las listas de espera se han visto incrementadas al focalizar todos los esfuerzos en la lucha contra la Covid-19.
Así lo ha señalado Francina Armengol, presidenta del Govern, al indicar que "obviamente ya estamos trabajando desde Salut en el plan de choque para disminuir las listas de espera, que desgraciadamente han aumentado durante nuestra lucha contra la pandemia. En este sentido seguiremos necesitando la fantástica mano que se nos tiende desde Cruz Roja Baleares".
El Hospital de la Cruz Roja dispone actualmente de tres quirófanos, 15 consultas externas, zonas de equipamiento diagnóstico, dos salas de endoscopias, dos salas de ecografías, un equipo de resonancia magnética, 76 camas, 40 habitaciones, un laboratorio de análisis clínicos, farmacia y un gimnasio de rehabilitación y fisioterapia.
