Las familias de Baleares destinan casi el 40% de sus ingresos a pagar una vivienda, un porcentaje elevado que obliga a los ciudadanos a tener que disminuir la inversión en otros sectores como el ocio o la restauración.

El mercado inmobiliario de las Islas cuenta con más demanda de vivienda que oferta disponible, provocando que los precios se hayan disparado.

De hecho, desde 2015, la vivienda se ha encarecido un 36%, afectando al dinero que destinan las familias a pagar un alquiler o una hipoteca, sumado a otros gastos corrientes como el gas, el agua o la electricidad.

Así, según datos del Instituto de Estadística de Baleares, en los últimos 5 años el porcentaje de ingresos que se destinan a pagar un inmueble ha aumentado en un 15,71%.

Además, la subida del IPC también ha afectado a esta situación. Y es que las Islas han registrado el mayor crecimiento de precios. Un incremento que, en muchos casos, ha llevado a invertir menos dinero en ocio, alimentación o restauración.