El problema estructural del acceso a una vivienda en Baleares había puesto en jaque el proceso de contratación en el sector hotelero. Un problema, el de la vivienda, sin solución a corto plazo, y ante el que cada empresario ha tenido que adaptar sus ofertas de trabajo.
"El sector en ningún momento ha dicho que habilitaría habitaciones. Creo que hay algunos empresarios que, al disponer de propiedades y viviendas, tienen la posibilidad de ofrecer alojamiento a sus trabajadores. Pero esto no es una novedad de este año, si no que se ha hecho desde siempre", ha apuntado la presidenta de la Federación Hotelera de Mallorca (FEHM), María Frontera.
El ritmo de contratación se ha acelerado a medida que se acercaba el inicio de la campaña de verano, pero lo cierto es que algunos establecimientos sí que se encontraron con alguna dificultad a la hora de conseguir completar sus plantillas.
Así lo ha señalado la propia Frontera, al indicar que "en algunos casos ha habido reducción de horario de servicios cuando ha sido necesario en algunos establecimientos, pero ahora mismo todo va cogiendo el ritmo que debiera".
El alto precio de la vivienda en nuestra comunidad afecta a todos los sectores, incluyendo al de la propia Administración Estatal, la cual también se encuentra con dificultades para cubrir unas plantillas incapaces de asumir el alto coste de vida presente en Baleares.
Un escenario complicado ante el que el propio conseller de Turismo y portavoz del Govern, Iago Negueruela, ha señalado que "el equilibrio en materia de vivienda ahora mismo pasa por seguir haciendo obra pública y tomar medidas más contundentes en regulación, sobre todo, del precio del alquiler".
Dificultades que no han impedido la apertura del 98 por ciento de la planta hotelera de Mallorca, con capacidad para unas 200.000 plazas, de cara a temporada de verano marcada por las buenas previsiones.
