Baleares está en el grupo de cabeza de las comunidades autónomas en las que más mujeres se someten a abortos voluntarios. La tasa por habitante es la tercera de España (11,8 abortos por cada mil habitantes), solamente superada por Catalunya y Asturias.
En el lado opuesto de este escalafón encontramos a Galicia, La Rioja y Extremadura, donde se han practicado la mitad de los abortos voluntarios que en Baleares.
Según los datos oficiales del Ministerio de Igualdad, en el año 2020, último con las estadísticas completas, en España se realizaron 88.269 interrupciones voluntarias de la gestación, una cifra inferior a la de antes de la Covid y que refleja la diversidad de esta práctica en las comunidades españolas. De hecho, esta misma estadística señala que en el mencionado 2020 no se realizó ningún aborto voluntario en centros sanitarios de la red pública de las comunidades de Madrid, Castilla-La Mancha, Murcia y Extremadura.
Asimismo, de todos los abortos voluntarios practicados en Baleares, 2.950 en la última década se practicaron a mujeres y adolescentes menores de edad.
Más en concreto, en 2020 abortaron voluntariamente 8 niñas menores de 14 años. Todas vivían con sus padres y cuatro de ellas no utilizaban métodos anticonceptivos en sus relaciones sexuales.
Según datos del Govern balear, en ese mismo 2020 interrumpieron voluntariamente su embarazo 255 mujeres y muchachas de entre 15 y 19 años. El 10 por ciento ya había abortado voluntariamente previamente, por lo que repetían la experiencia, y 15 de ellas ya había sido madre alguna vez.
