El equipo balear está obligado a ganar si quiere tener opciones de asegurar la permanencia, ya que es penúltimo con 39 puntos, a 4 de la salvación cuando restan cuatro partidos para que acabe el campeonato.
La derrota en la jornada pasada en el campo del Real Valladolid (2-1) cortó una racha de dos victorias seguidas de los mallorquinistas, frente al Sevilla Atlético (2-3) y Elche (1-0).
El mensaje que tanto el técnico Sergi Barjuan y los jugadores han lanzado este semana, es que el equipo «esta vivo» y que peleará hasta el final para escapar de un descenso que tendría funestas consecuencias para el futuro deportivo de la entidad balear.
Uno de los principales accionistas, el ex tenista Andy Kohlberg, se ha desplazado a Palma desde Estados Unidos para analizar la difícil situación del equipo con el consejero delegado Maheta Molango, y ha anunciado su intención de presenciar el partido ante el Almería.
Barjuan no podrá contar con el lesionado defensa lateral Joan Oriol, con molestias físicas, y tendrás que decidir si sitúa en ese puesto a Saúl García o Angeliño.
Asimismo, tampoco ha entrenado al mismo ritmo que sus compañeros el máximo realizador mallorquinista esta temporada, Brandon Thomas, con 9 goles, también con problemas físicos.
El club ha regalado dos entradas a cada socio con el objetivo de que acuda a Son Moix el mayor número posible de aficionados para apoyar al equipo.
Por su parte, el Almería juega este sábado uno de los partidos más importantes de las últimas jornadas, ya que la victoria puede situarle muy cerca de la salvación tras haber ganado tres de los últimos cuatro partidos y estar fuera del descenso por tercera jornada consecutiva.
Para este partido, Luis Miguel Ramis, entrenador almeriense, tendrá el problema de que las tarjetas y las lesiones han hecho mella en el conjunto rojiblanco, pese a lo que recuperará a Nano para el duelo ante los baleares, aunque pierde a Kalu Uche por lesión y es duda Fran Vélez.
El equipo ha trabajado hoy a puerta cerrada en el Estadio de los Juegos Mediterráneos para ultimar los detalles de un compromiso fundamental para las aspiraciones del equipo almeriense, que hoy viaja a Palma de Mallorca.
